No ya en coloquios y circulares, sino en varios de los escritos presentados en los Juzgados y procedentes del Consejo General del Notariado se repite con la intención de que alcance rango de verdad, que el Colegio Notarial de Madrid impugnó las compensaciones cunado dejó de ser Presidente su decano, dejando resbalar la presunción de que antes sus Decanos se habían beneficiado sistemáticamente con ellas. Y esto es una insinuación calumniosa ...
El Colegio Notarial de Madrid se siente orgulloso de la brillante pléyade de notarios que desde su fundación en la conciencia de ejercer cargos honoríficos gratuitos o incluso sin cargo se han entregado abnegadamente al servicio del notariado sintiéndose honrados simplemente con la  prezañadida a la institución. Y a pesar de haber sido y ser casi siempre mayoría en todas las prestaciones, ninguno -salvo uno y es bien sabido- ha percibido compensaciones ni institucionales ni privadas. Incluso a este Colegio pertenece quien las ha rechazado explícitamente cuando se las han ofrecido, caso de García Collantes. Y no porque el Colegio de Madrid sea metafísicamente contrario a las compensaciones, sino porque sostiene -y esta ha sido una constante, salvo la laguna ya conocida y entonces clandestina- que sólo será posible fijarlas cuando se reforme el Reglamento, que es contundente al respecto, y se hagan con transparencia, es decir con conocimiento y anuencia de los que nutren los fondos de donde los beneficiados las perciben. Y esto fue así antes del año 2000 y después del 2005.
Una afirmación en otro sentido solo podrá tildarse de calumniosa y mancillará el honor de un Colegio universal y generoso que EL NOTARIO DEL SIGLO XXI se siente obligado a defender.