ENSXXI Nº 52
NOVIEMBRE - DICIEMBRE 2013
Aniversario Rajoy: Bienio en tiempos revueltos
- Detalles
- Escrito por José Oneto
- Categoría: Revista 52 , Panorama
JOSE ONETO
Periodista y escritor
El 19 de Diciembre de 2011, hace ahora dos años , Mariano Rajoy pronunciaba en el Parlamento su discurso de investidura como Presidente del Gobierno de España , con un país en plena crisis económica , con una de las tasas de paro más alta de Europa ,con un déficit público desbordado, con una burbuja inmobiliaria que había estallado y había producido unos efectos colaterales devastadores, con una oposición socialista sin apenas fuerza política resultado, de unos daños electorales inéditos, hasta entonces , en la historia del PSOE, con un ex Presidente que se había negado sistemáticamente a pronunciar la palabra "crisis", y que abandonaba el poder con un partido desarticulado , desanimado y hundido psicológica y electoralmente , y con una cierta esperanza en el país de que quienes llegaban , por todo lo que habían prometido en la campaña electoral, mejorasen la situación, a pesar de los tiempos revueltos que se estaban viviendo y que se esperaban que aumentasen.
Por eso, quien durante la campaña fue acusado por el resto de los partidos de tener una Agenda oculta, adelantándose a lo que iba a venir , prometía en su primer discurso en el Parlamento, decir la verdad, toda la verdad “ Decir siempre la verdad, aunque duela, sin adornos y sin excusas: llamar al pan, pan, y al vino, vino”. Y, además ofreciendo también diálogo y transparencia sin voluntad de mirar atrás o de pedir responsabilidades a nadie, "Sabíamos y sabemos lo que nos espera y sabíamos y sabemos que se nos juzgará por lo que consigamos y no por lo que intentemos o por cómo nos hemos encontrado las cosas", en un país asolado por la Deuda Pública y por un paro del 23 por ciento.
"El 19 de Diciembre de 2011, hace ahora dos años, Mariano Rajoy pronunciaba en el Parlamento su discurso de investidura como Presidente del Gobierno de España, con un país en plena crisis económica, con una de las tasas de paro más alta de Europa"
La solución para el candidato estaba en tres ámbitos :en la Disciplina presupuestaria, en la reforma financiera y en la reforma laboral, Además de en un diálogo permanente con todos los sectores de la sociedad , una rigurosa justicia en el reparto de la austeridad, que debía comenzar por el propio Gobierno y, un escrupuloso respeto al derecho ciudadano de conocer la verdad, porque sería temerario pretender engañarnos o engañar a los demás En esos tres ámbitos de actuación que anunciaba el Presidente electo, en su debate de investidura. "La disciplina presupuestaria es crucial" según sus palabras, y "la reforma de la Constitución es, parte Del camino ya andado. Pero ahora, debemos ir más allá: La ley de estabilidad presupuestaria será, decía, la primera medida” que tome el nuevo Ejecutivo del PP. En segundo lugar, la recuperación del crédito a través de la reforma financiera: "No será posible la recuperación del crédito sin el saneamiento del sector financiero”, advertía. Y en tercer lugar, reducir costes a través de un paquete de reformas para la función pública, basado en la premisa 'una competencia, una administración'.
Quien había prometido todo un tratado económico, liberal y gran preocupación por los sectores más débiles (“este es el verdadero partido de los obreros” aseguraba en los mítines de campaña la secretaria general del Partido María Dolores de Cospedal), comenzaba, desde el principio a hacer todo lo contrario de lo que había prometido. Subía los impuestos, (50 solo en el año 2013), después de haber repetido ,una y mil veces , que los bajaría , porque era la única fórmula para que el dinero estuviese en el bolsillo de los ciudadanos y no en las arcas del Estado , con lo que se garantizaba el crecimiento económico y la creación de empleo. Afrontaba la reforma del sistema financiero, metiendo miles de Millones de Euros en Bancos y Cajas de Ahorro, que terminarán pagando los ciudadanos en una cantidad que supera, por el momento, los 36.000 millones de euros, que irá a parar a la Deuda Pública, Y, todo eso, sin que por supuesto se haya recuperado el crédito prometido Se hacía frente a la disciplina presupuestaria con un criterio y unas medidas, que hacían imposible el cumplimiento de los objetivos de déficit contenidos en el Pacto de Estabilidad firmado con Bruselas. Y, se aprobaba una reforma laboral, que ha destruido en estos dos años de gobierno popular cerca de un millón de puestos de trabajo, con lo que nos hemos colocados por encima del 27 por ciento .y con un paro juvenil dramático para cualquier sociedad y mucho más para la española, condenada a mandar fuera del país a lo mejor de toda una generación.
España tenía este verano la tasa de paro juvenil más elevada de la Unión Europea, sólo superada por Grecia, y se situaba 31,6 puntos porcentuales por encima de la media de la Eurozona. En concreto el porcentaje de desempleados menores de 25 años en España era del 56, 5% en septiembre, último mes en que hay datos disponibles. En el caso de España, además, se da el problema de los jóvenes que ni estudian ni trabajan, los conocidos popularmente como "minis", que son un 5,6% más que la media de la Unión Europea.
Haciendo un balance económico de este” Bienio Rajoysta”, habría que decir que en 2011, en España había 17,8 millones de personas que trabajaban, que dos años después hay un millón menos, y que el paro ha crecido en 631.000 desempleados. La economía que está empezando a salir de la recesión, después de nueve trimestres, registra una tasa negativa de crecimiento interanual del 1, 2 %, el doble que cuando Rajoy llegó al poder. La deuda se ha incrementado en 218.000 millones de euros en dos años hasta situarse en los 954.000 millones de euros, casi el 94% del PIB . Esa escalofriante cifra supone una deuda de 56.00 euros por familia, una cantidad que supera, ampliamente, la media de ingresos anuales de los españoles.
"Quien durante la campaña fue acusado por el resto de los partidos de tener una Agenda oculta, adelantándose a lo que iba a venir, prometía en su primer discurso en el Parlamento, decir la verdad, toda la verdad"
Han sido tantos los incumplimientos, que Rajoy se ha visto obligado a decir que él, no ha cambiado, que lo que ha cambiado es la realidad. Una realidad que ha dejado vacía de contenido numerosísimas frases y promesas electorales. "No daré dinero público para ayudar a los bancos". "Garantizaré siempre el poder adquisitivo de las pensiones, ". "No vamos a reducir las prestaciones por desempleo". "No subiré los impuestos, los bajaré". "No habrá copago en sanidad". "La reforma laboral del PSOE ha abaratado el despido". "Yo no soy como usted, señor Rubalcaba, lo que no llevo en mi programa no lo haré". "El PP se compromete a que educación, sanidad y pensiones jamás se verán afectadas por la crisis " “Siempre diremos la verdad y llamaremos pan al pan y vino al vino” Esta larga lista se cerraba el pasado 20 de Noviembre con otra promesa: en los dos años que quedan de legislatura se creará un millón de puestos de trabajo, para enmendar el propio pronóstico que el Gobierno enviaba a Bruselas en el mes de Abril, y que anunciaba un final de legislatura con más parados que cuando se inició.
Durante este” Bienio en tiempos revueltos “, el Presidente se ha visto condicionado por dos temas que, a pesar de su carácter tan inalterable, han llegado a quitarle el sueño. Uno , es el rescate soberano del país que estuvo a punto de consumarse antes de esta pasada primavera , y al que se resistió, con una sangre fría y una decisión en las que nadie creía, Desde fuera, desde los grandes medios de comunicación internacionales , desde las Agencias de calificación , desde muchos servicios de estudios e instituciones nacionales , el rescate parecía inevitable y su gran éxito político , ha sido resistir, aguantar ,hasta que Draghi y el Banco Central Europeo (BCE) anunció su disposición a comprar bonos de países en dificultades , como España , para salvar el euro . Bajó la prima de riesgo, empezó a colocarse la Deuda Pública a precio más razonable y, afortunadamente, al rescate bancario no sucedió, como se temía, un rescate soberano como el de Irlanda, Portugal o Grecia.
Con el otro tema, el que afecta al escándalo protagonizado por el ex Tesorero del partido Luis Bárcenas, no ha tenido la misma suerte, y la fecha del ecuador de la legislatura se le ha complicado con un auto del juez de la Audiencia Nacional, Pablo Ruz en el que afirma que existen indicios de que, como viene denunciando Bárcenas, el Partido, desde hace años, ha tenido una doble contabilidad y que en esa doble contabilidad ha jugado un papel importante el dinero negro. Un dinero negro que puede venir de esas donaciones de constructoras que querían recibir a cambio contratas de obras en Ayuntamientos o Comunidades gobernadas por el PP.
"Han sido tantos los incumplimientos, que Rajoy se ha visto obligado a decir que él, no ha cambiado, que lo que ha cambiado es la realidad. Una realidad que ha dejado vacía de contenido numerosísimas frases y promesas electorales"
Según Ruz, con ese dinero B, y lo atestiguan informes de la Unidad de Delitos Económicos y Financiaros (UDEF) de la policía, se habrían pagado las obras de la sede del partido en la calle Génova 13. Igualmente, ese dinero negro, habría servido para pagar los sobresueldos de la cúpula popular, tanto durante el mandato como Presidente del partido de José María Aznar como de Mariano Rajoy. La torpeza del Presidente del Gobierno a la hora de enfrentarse con este escándalo, lo que en principio era el escándalo Barcenas, el escándalo de su dinero en Suiza, se ha convertido en el escándalo de la financiación ilegal del partido para a desembocar en el escándalo Rajoy: el escándalo de un responsable político que se niega a dar explicaciones, que no dice la verdad en el Parlamento, que es incapaz de presentar un relato creíble, que se pueda contraponer al de Bárcenas, y que parece esconder datos que no quiere que conozca una ciudadanía cada vez mas alarmada, en estos tiempos revueltos, por la corrupción.